Edición Española
    Biblioteca

    Tomás de Iriarte

    Del oro, como muchos, no dependo

    Del oro, como muchos, no dependo,
    Fabio, pues ni le guardo ni codicio;
    ni dependo jamás del vulgar juicio,
    pues dar a luz mis obras no pretendo.

    Del sexo mujeril casi no pendo,
    pues amo por placer, no por oficio;
    y aun menos de la corte y su bullicio,
    pues de fingir y de adular no entiendo.

    Solamente dependo de la muerte,
    ya que discurso no hay ni diligencia
    que de su despotismo nos liberte.

    Mas la espero sin miedo y con paciencia,
    vivo sin desearla; y de esta suerte,
    amigo, se acabó la dependencia.




    TAMBIÉN TE PUEDE INTERESAR


    © 1991-2024 The Titi Tudorancea Bulletin | Titi Tudorancea® is a Registered Trademark | Aviso legal
    Contact