Edición Española
    Biblioteca

    Cristóbal Suárez de Figueroa

    Hermosos cabellos de oro

    ¡Hermosos cabellos de oro,
    Principio y fin de mis glorias,
    Vos solo sois mi tesoro,
    Prendas sois, y sois memorias
    De la luz en quien adoro!

    Celebro esta perfeccion,
    Aplicando con razon
    Estos divinos despojos
    A la boca y á los ojos,
    Y al lado del corazón.

    Sed testigos, pues vinistes
    A parar á mi presencia,
    De tantos gemidos tristes
    Engendrados en ausencia
    De la flor donde nacistes.

    ¡Cuán bien os podeis quejar
    De que os hiciese cortar!
    Mostrad, que es justo, despecho:
    A quien tal daño os ha hecho
    No le querais consolar.

    Estábades adorados
    Con magestad y poder,
    De mil flores adornados,
    Y ahora venís á ser
    De mis lágrimas bañados.

    En lugar de estos despojos
    Ofrezco penas y enojos
    Siempre prontos á serviros,
    Enjugando con suspiros
    Lo que bañáren mis ojos.

    No siento ya mi pasion,
    Ni me aflijo cuando lloro,
    Porque es feliz la prision
    Donde con cadenas de oro
    Se liga mi corazon.

    Gozoso estoy rodeado
    De metal, que es tan preciado;
    Que mi prisión sin igual
    Es del mas alto metal
    Que amor jamas ha labrado.

    Mas bellos me pareceis,
    Si, cuanto mas os contemplo,
    Que sois y siempre sereis
    Del sol retrato y ejemplo
    Por lo que resplandeceis.

    Aviva los resplandores
    Este cordon de colores,
    Con que venís recogidos,
    Y alegrando mis sentidos,
    Sembrais en mi pecho ardores.

    Para mas confirmacion,
    Lazo haceis de vos cabello,
    Y del precioso cordon
    Nudo, que aprieta mi cuello
    En señal de sujecion.

    Al punto que os conocí,
    La libertad os rendí,
    De suerte que si hay momento
    Que os niegue mi pensamiento,
    Huya mi alma de mí.




    TAMBIÉN TE PUEDE INTERESAR


    © 1991-2024 The Titi Tudorancea Bulletin | Titi Tudorancea® is a Registered Trademark | Aviso legal
    Contact