Edición Española
    Biblioteca

    Juan de Moncayo

    A un crucifijo

    Arroyos surcan de coral sagrado
    en tu bella deidad el rostro hermoso,
    ¡oh Señor!, cuyo tránsito amoroso
    quebrantó los abismos del pecado.

    Tu clemencia, que el círculo estrellado
    describe con incendio misterioso,
    impuso desde el centro tenebroso
    contra ti el golpe de rigor armado.

    Mis culpas ocasionan esas penas
    que abundan en purpúreos resplandores,
    el efecto más triste de mi llanto.

    ¡Oh verdadero Isac, por cuyas venas,
    en fuentes de rubí, formando flores,
    hollaste los horrores del espanto!




    TAMBIÉN TE PUEDE INTERESAR


    © 1991-2024 The Titi Tudorancea Bulletin | Titi Tudorancea® is a Registered Trademark | Aviso legal
    Contact